La memoria es la fuerza salvadora

agosto 25, 2012

Por: Gladys González


Reunidos en el patio central del Museo de la Ciudad, Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad de La Habana y algunos de sus más cercanos colaboradores, recordaron el aniversario 123 del natalicio de Emilio Roig de Leuchsenring, fundador de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana. Este acto que se ha celebrado invariablemente desde la segunda mitad de la década del 60 del siglo XX, resulta un encuentro entrañable para quienes, seguidores del legado de Roig, se definen como guardianes de la memoria.
La evocación a Roig y su ejemplo, resulta un estímulo para quienes multiplican y reviven muchas de las iniciativas del fundador. Quien por su legado – como aseguró Eusebio Leal-  no pude ser una figura momificada sino viva. “Nunca consideré que era necesario momificar la figura del Dr. Roig sino darle vida cotidiana y preocuparnos por la continuidad de sus ideas. A sus preocupaciones por la africanidad en la cultura cubana sobrevino la casa de África, a sus ingentes desvelos por las publicaciones fundamos la Editorial Boloña, ante su interés por los congresos de historia respondemos con los eventos que hoy realizamos y la refundación de la Academia Cubana de la Historia. Continuando su vocación por las visitas dirigidas y las conferencias, creamos las Rutas y Andares que multiplicaron por decenas de miles los que asisten a escuchar las palabras de los guías”.
“Cada una de esas cosas que tenían un valor fundacional se multiplicaron por cientos -confesó Leal. Ese es el papel de la semilla”. Una semilla que se esparce no solamente por el Centro Histórico habanero, sino por toda la capital y el resto del país. “La Oficina del Historiador es una institución que hoy se replica en la Isla… Nos encontramos en el Paraninfo de la Universidad de La Habana, el Capitolio Nacional, el Cementerio de Colón, restaurando monumentos que no deben abandonarse, en el Teatro Martí, colaborando con la restauración del Gran Teatro de La Habana, las locomotoras del parque ferroviario nacional, …”
Con esta voluntad de continuación que comenzó la ardua tarea de recuperar el legado del Dr. Roig y multiplicarlo, se impone entonces como preocupación la perdurabilidad de la obra. “Nuestra principal preocupación debe ser que la obra no se pierda –apuntó Leal. Guardianes de la memoria que defiendan con las uñas, unidos, lo que nosotros hemos dejado… resultado de mucho trabajo y de la voluntad de los cubanos que donaron todo aquello que querían que fuera conservado”.
El acto celebrado para recordar el natalicio del Dr. Roig reafirmó la decisión de los actuales hacedores de la gesta habanera de continuar la labor de conservar la memoria. “No perdamos la memoria –alertó Leal-; porque esa es la fuerza salvadora”. 

Centro HistóricoEmilio RoigLa HabanaOficina del Historiador

Compartir

  • imagen
  • imagen
  • imagen
  • imagen
Historiador de la Ciudad de La Habana 2011
Desarrollado con: WordPress | RSS
Válido con: HTML | CSS