La Habana en la memoria universal

Por: Ana Lidia García Hernández

Foto: Néstor Martí

Oficialmente La Habana, capital de Cuba, es una de las siete ciudades maravillas del mundo. Aun bajo incesante lluvia se reunieron invitados y fieles a la ciudad este 7 de junio en el Castillo de San Salvador de la Punta para participar en el acto de declaratoria. El Sr. Bernard Weber llegó a la ceremonia como presidente de la fundación suiza New7Wonders, que promovió en el año 2014 la votación mundial para seleccionar a las urbes.
Por la parte cubana presidieron la celebración Mercedes López Acea, Vicepresidenta del Consejo de Estado de la República de Cuba y Primera Secretaria del Partido Comunista en La Habana; Martha Hernández Romero, Presidenta del Poder Popular en La Habana; el Doctor Eusebio Leal Spengler, Historiador de La Habana; Julián González Toledo, Ministro de Cultura y otros representantes de instituciones gubernamentales.

El monumento con la placa conmemorativa que acredita a La Habana como Ciudad Maravilla fue develado en la explanada del Castillo de San Salvador de la Punta. Foto: Yaimí Ravelo / Granma

Ante quienes no renunciaron a presenciar el acto, el Sr. Weber expresó la satisfacción por encontrarse en La Habana y denominó la experiencia como “momento histórico”, pues “nunca antes en la historia de la Humanidad había sido posible hacer una votación global y seleccionar las siete ciudades maravillas del mundo”.
Uno de los elementos del proceso de selección destacado por el también fundador de la New7Wonders, fue la participación activa de los ciudadanos en sus países y de los seguidores de las urbes en todo el mundo: “La competencia fue alegre y justa; es por eso que haber clasificado en la lista es un éxito para La Habana y para las otras seis ciudades”, aseguro Weber.
Para finalizar su intervención, este apasionado del patrimonio mundial y tenaz defensor de los valores globales, explicó que desde el comienzo su objetivo fue inspirar y suscitar motivación en temas que conciernan a todos en el planeta. Con este reconocimiento, aseguró, “La Habana, maravilla de Cuba, entra a la memoria universal”.

Foto: Néstor Martí

Por otro lado, la Sra. Martha Hernández en sus palabras de agradecimiento, expresó que la capital cubana “forma parte esencial de la cultura material del país y representa una pieza sustancial de la memoria histórica, con extraordinarios valores arquitectónicos y urbanísticos”. Su historia, arquitectura y trazados urbanos, agregó, “han sido favorecidos por la existencia de un variado medio natural que exalta su imagen, donde destacan el extenso litoral, la bahía y su clima favorable que, junto a la vegetación y su gente, son virtudes que la distinguen entre otras urbes”.
Asimismo, resaltó la suerte de que esta ciudad haya quedado alejada del auge desarrollista que ha transformado a la mayoría de las de su tipo en América Latina. En tal sentido, dedicó un reconocimiento especial a la labor de restauración que ha llevado a cabo la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana para mantener la belleza de la parte más añeja de la villa de San Cristóbal.

Foto: Néstor Martí

Momento singular fue también el agradecimiento al Comandante Fidel Castro, “quien siempre apreció sus valores” y confió en el Dr. Leal para emprender la tarea titánica de convertir en hermosos sitios los lugares a veces en ruinas. “A él le dedicamos esta declaración en su 90 cumpleaños”, concluyó.
Minutos después de develar el monumento conmemorativo, que desde la noche de este 7 de junio puede ser apreciado en la explanada de La Punta, el Dr. Eusebio Leal conversó con los periodistas: “Ya teníamos la convicción profunda de que La Habana es una maravilla, pero que muchas otras personas lleguen a ese consenso es algo importante. Esta declaración es un reconocimiento a la labor de muchos que han trabajado y soñado a lo largo de los años, es un aliento para seguir trabajando. Por suerte la ciudad está intacta, venida a menos a veces pero cuando se rasga el velo de esa aparente decadencia, aparece su esplendor en cualquier edificio. Tenemos que tener ojos para ver la maravilla y un corazón que nunca desmaye”, afirmó el también Diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Foto: Néstor Martí

La lluvia que acompañó esta celebración fue sin dudas un símbolo de bendición para la capital de la Isla, que pronta a sus 500 años vuelve a vestirse de gala para recibir a millones de visitantes que ahora, con más fuerza que nunca, querrán conocerla o revisitarla. Para sus habitantes, este acontecimiento purificado por la naturaleza puede significar la inspiración que los impulse a cuidarla y conservarla, para que siga siendo una de las ciudades más mágicas del mundo.

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